El embarazo es uno de los momentos más especiales de la vida de una futura mamá. Está lleno de emoción, alegría y expectación por conocer al nuevo bebé. Pero, admitámoslo, el embarazo también puede ser una época estresante gracias a las cosas que se deben y no se deben hacer para mantener al bebé sano y salvo. Un aspecto que puede causar mucha confusión es qué no se debe comer durante el embarazo. Sí, hay una lista de alimentos que las mujeres deben evitar durante el embarazo, pero para las primerizas en particular puede ser difícil saber qué se puede comer y qué no.
Hemos creado una guía completa sobre lo que no se debe comer durante el embarazo para que puedas consultarla en todo momento. De este modo, la planificación de las comidas te resultará más fácil y podrás centrarte en otras cosas.
Algunos pescados pueden no estar en la lista de "seguros
El pescado es una opción dietética maravillosa para casi todo el mundo, ya que está repleto de vitaminas y nutrientes saludables. Dicho esto, algunos tipos de pescado deben evitarse durante el embarazo, ya que pueden presentar riesgo de listeria, peligrosa para el bebé.
Algunos tipos de pescado que deben evitarse durante el embarazo son:
- Marisco crudo
- Tiburón
- Pez espada
- Marlín
- Pescado curado
- Pescado ahumado en frío
Si tiene antojo de pescado, asegúrese de consumirlo con moderación y elija los que tienen bajo contenido en mercurio pero altos niveles de ácidos grasos Omega-3. Algunos buenos ejemplos de este tipo de pescado son las sardinas, el salmón y la trucha de agua dulce. Algunos buenos ejemplos de este tipo de pescado son las sardinas, el salmón y la trucha de agua dulce. ¿Qué cantidad de pescado se considera segura? Los expertos sugieren no más de dos raciones de pescado azul a la semana.
La carne conlleva algunas precauciones
Para los amantes de la carne, la buena noticia es que hay muchas opciones seguras durante el embarazo. Consumir carne magra durante el embarazo es una fuente saludable de proteínas de alta calidad. Si necesitas un aporte extra de vitamina B y hierro, la carne de cerdo y ternera son excelentes opciones.
¿Qué carne debe evitarse? Las carnes curadas pueden ser complicadas, ya que deben cocinarse bien. Esto incluye productos como el jamón serrano, el salchichón y el salami. La carne de caza es una categoría que debe evitarse por completo durante el embarazo.
Un último consejo sobre la carne es que la cocines bien. Esto significa que los jugos sean transparentes y que la carne ya no esté rosada.
Los lácteos no pasteurizados no son recomendables
Los lácteos son algo que la gente suele consumir a diario. El queso, la nata, el yogur, el helado y la leche son alimentos deliciosos. La buena noticia es que no es necesario renunciar a los lácteos, sino elegir productos pasteurizados.
Algunos ejemplos de productos lácteos que deben evitarse son:
- Nata o leche de oveja, vaca o cabra sin pasteurizar.
- Queso azul blando, pasteurizado o no
- Queso de cabra de pasta blanda elaborado con leche no pasteurizada
- Queso blando madurado con moho, pasteurizado o no
¿Tiene antojo de queso pero no está seguro de qué se considera seguro? Elija siempre quesos duros pasteurizados o no pasteurizados, como el parmesano o el cheddar. Incluso los quesos semiduros pasteurizados suelen ser seguros durante el embarazo.
¿Qué pasa con las frutas y verduras?
La buena noticia es que, en lo que se refiere a frutas y verduras, puedes comer lo que quieras, con una salvedad. Todo debe aclararse bien antes de comerlo. Así que tómate el tiempo necesario para enjuagarlos bien y dedica más tiempo del que creas necesario a hacerlo.
Para una mayor dosis de vitaminas, nutrientes y minerales, algunas buenas opciones son:
- Naranjas
- Manzanas
- Mangos
- Bayas
- Plátanos
- Espinacas
- Boniatos
- Brócoli
- Remolacha
¿Se consideran buenas todas las bebidas?
Esta guía se ha centrado principalmente en los alimentos, pero hay algunas bebidas que también deberías evitar. Muchas mujeres tienen la impresión de que la cafeína está prohibida, pero en realidad se trata de restringir su consumo. En general, puedes tomar hasta 200 mg de cafeína al día siempre que tanto tú como tu bebé estéis sanos.
Un exceso de cafeína puede aumentar el riesgo de ciertos problemas de salud del bebé, como bajo peso al nacer, complicaciones y abortos espontáneos, así que, en caso de duda, consulta primero a tu médico de cabecera si puedes tomar cafeína. Si puedes renunciar a la cafeína durante el embarazo, es la opción más prudente.
Luego están las bebidas alcohólicas, que no deben consumirse en ninguna cantidad durante el embarazo. El alcohol puede suponer un riesgo para la salud de tu bebé, por lo que se aconseja evitarlo por completo.